¿Qué está pasando en Hermosillo? Y la gobernadora Pavlovich sin decir ni pío: Alfonso Durazo

Los hermosillenses hemos venido recibiendo de parte de los gobiernos federal, estatal y municipal, una sucesión de golpes a la economía familiar que parecen no tener fin. A un garrotazo ha seguido el otro, y el otro y el otro.

Iniciamos el gobierno de Claudia Pavlovich con un incremento de 5 mil millones de pesos a la deuda pública, que nos ubica en el sexto lugar de los estados más endeudados del país. A ello le siguió el aumento del 60 por ciento a la tarifa del agua. Vino de inmediato un aumento en las multas de tránsito. En Obregón se concesionó el servicio de recolección de basura. El presidente municipal de Hermosillo decidió poco después eliminar el seguro a vivienda que se incluía en el pago del impuesto predial. A ello le siguió, desde el gobierno federal, el gasolinazo de enero. Como si fuera poco, se aprobó en estos días la concesión a manos privadas del servicio de alumbrado público, que comprometerá los ingresos públicos del presente y del futuro, cuando estos gobernantes tracaleros ya no estén aquí.

Todas estas medidas tienen un denominador común: es la sociedad la que está pagando los costos de la mala administración de los gobiernos corruptos, despilfarradores e ineficientes en Sonora. Para ello ha operado una alianza entre el PRI y el PAN a nivel federal, estatal y municipal. Que no nos quieran dar atole con el dedo: no se trata de una regidora panista descarriada lo que hizo posible la privatización del alumbrado público, sino de todo un sistema de acuerdos en lo oscurito con el que estos dos partidos han venido gobernando a México en contra de los intereses de la sociedad.

Mientras esto ocurre, la gobernadora Claudia Pavlovich anda por todas partes, menos donde debería estar. Sigue sin decir ni pío, olímpicamente ajena y ausente del auténtico desgarriate que vivimos, gracias a la ráfaga de aumentos que no cesa en Hermosillo.

Alfonso Durazo,
Presidente Estatal de Morena Sonora.