Morena se solidariza con los maestros que se oponen a la reforma educativa

“El examen de evaluación a los maestros busca arrebatarles derechos laborales adquiridos; MORENA se opone rotundamente a ello y se solidariza con los maestros que resisten a ese despojo”: Alfonso Durazo.

Alfonso Durazo Montaño, presidente de MORENA en Sonora, se solidarizó con los maestros sonorenses que se oponen al examen de evaluación y consideró que la mejora de la educación no se logrará reprobando a los maestros con un examen antipedagógico y arrebatándoles sus derechos laborales.

En la reforma educativa, explicó, se obliga a los maestros a una evaluación en la que se decidirá su permanencia o no en el empleo en las escuelas primarias, secundarias y del nivel medio superior.

Durazo mencionó que, de acuerdo a los expertos mexicanos e internacionales en materia educativa, no es efectivo evaluar a los maestros mediante exámenes estandarizados de opción múltiple, que han fracasado como forma de evaluación en países que son líderes en calidad educativa, como el caso de Finlandia, donde ni siquiera se aplican este tipo de exámenes.

En un país con grandes atrasos culturales como México y con una clase gobernante que suele copiar ciégamente políticas públicas de los Estados Unidos, manifestó el Presidente de MORENA, se nos viene a ofrecer como panacea lo que allá ya se demostró ha sido un rotundo fracaso.

Incluso en ese país, desde hace diez años, los exámenes estandarizados de opción múltiple no han funcionado para mejorar la calidad de la educación ni la práctica de los docentes, lo que ha desatado un debate entre padres de familia, estudiantes, maestros y autoridades educativas para encontrar nuevas soluciones.

Los maestros mexicanos, dijo el dirigente de MORENA, están entre la espada y la pared con la evaluación obligatoria, ya que la Secretaría de Educación Pública busca que quienes lo presenten renuncien a sus derechos adquiridos, por encima de lo que marcan la Ley Federal del Trabajo y la Constitución de la República.

Sobre todo, expresó Durazo Montaño, se busca que pierdan de manera irreversible su nombramiento-base. Es decir, jurídicamente las consecuencias serán nefastas para los maestros que se presenten a la evaluación, ya que se les obliga a renunciar a sus derechos de forma voluntaria, algo que va contra todo principio básico del derecho.
La evaluación docente pasa por alto factores como la desigualdad y las condiciones sociales en que viven los mentores y sus alumnos en estados ricos y pobres, en zonas urbanas y rurales. «Los más perjudicados», advirtió Durazo, «serán los profesores que trabajan en escuelas con bajo desempeño por causas ajenas a su habilidad docente».

El problema no es si evaluamos o no a los maestros, aclaró Durazo, si no cómo lo estamos haciendo. Es importante que las escuelas y los docentes den resultados, pero la forma en la que lo hacemos debe de ser efectiva y justa.
Lo que persigue la mal llamada reforma educativa -concluyó Durazo- es evaluar para castigar y no evaluar para corregir los problemas estructurales de la educación en el país. Morena apoya incondicionalmente a los maestros que se oponen a esta reforma.

(Publicado el 16 de noviembre de 2015).