Alfonso Durazo, presidente de Morena Sonora expresó que las reformas estructurales de Peña Nieto, como la educativa, no funcionarán porque están desligadas de las necesidades reales de la gente, y para su implementación no se tomó en cuenta la opinión de los maestros, porque se trata esencialmente de una reforma que afecta los derechos laborales de los docentes.
En un país con grandes atrasos culturales como México y con una clase gobernante que suele copiar ciegamente políticas públicas de los Estados Unidos, manifestó el Presidente de Morena, se nos viene a ofrecer como panacea lo que allá ya se demostró ha sido un rotundo fracaso.
Durazo mencionó ante un grupo del magisterio en Nogales, Sonora que la reforma educativa, de educativa, no tiene nada y recordó que cuando fue aprobada en la Cámara de Diputados, los legisladores lo hicieron en cuestión de horas, sin debate o modificación alguna. Dijo que los diputados estuvieron a salto de mata, cambiando varias veces de lugar para sesionar. Estaba contenida en tres iniciativas y mil 500 cuartillas e implicaba la modificación de 13 artículos constitucionales.
“La reforma sólo tenía el propósito de facilitarle a la Secretaría de Educación Pública el despido de los maestros y no rompió el vínculo corporativo entre el PRI y el SNTE. Sin romper esa relación jamás se mejorará la calidad educativa en México”, puntualizó.
El dirigente de Morena expresó que dicha reforma no resolverá ninguno de los problemas de educación del país, al contrario los agravará por qué lo único que hace es flexibilizar la situación administrativa de cada uno de los maestros para poder prescindir de ellos sin ninguna responsabilidad para el patrón, en este caso la Secretaría de Educación Pública. Todo por razones políticas.
Durazo destacó que mantiene su solidaridad con los maestros sonorenses que se oponen al examen de evaluación y aseveró que la mejora de la educación no se logrará reprobando a los maestros con un examen antipedagógico que les arrebatará sus derechos laborales.
En su visita al municipio fronterizo explicó que no es efectivo evaluar a los maestros mediante exámenes estandarizados de opción múltiple, que han fracasado como forma de evaluación en países que son líderes en calidad educativa, como el caso de Finlandia, donde ni siquiera se aplican este tipo de exámenes.
La evaluación docente pasa por alto factores como la desigualdad y las condiciones sociales en que viven los mentores y sus alumnos en estados ricos y pobres, en zonas urbanas y rurales. «Los más perjudicados», advirtió, «serán los profesores que trabajan en escuelas con bajo desempeño por causas ajenas a su habilidad docente».