La liberación de Guillermo Padrés Dagnino, hijo del exgobernador Padrés, decretada por un juez federal después de que la PGR se desistiera de las acusaciones por lavado de dinero y delincuencia organizada en su contra, revela dos aspectos preocupantes sobre la supuesta lucha contra la corrupción: por un lado, que los acusaciones están malsustentadas y presentadas, o por el otro, que se trata de un mero espectáculo de carácter político, afirmó Alfonso Durazo.
«En ambos casos la impunidad triunfa y la ciudadanía pierde», lamentó el presidente estatal de Morena.
«El tema del fondo sigue siendo que, con dos años de acusaciones por parte del gobierno estatal en los medios y con meses de procesos legales, nada han recuperado los sonorenses del saqueo al erario; ni un solo peso. Los abusos del poder siguen sin ser castigados. El gobierno solo alimenta el morbo y la propaganda. Queda a la vista el pacto de complicidad e impunidad que es la esencia del cogobierno entre el PRI y el PAN. Es hora de que los sonorenses abran los ojos y vean que el PRIAN existe y no es una mera figuración retórica. Nuestro estado requiere de una alternativa real de cambio y ya no más de la simulación en que se especializan el PRI y el PAN, idénticos a la hora de cubrir entre ambos a sus gobiernos corruptos», concluyó.