Es desafortunado que los integrantes del magisterio se vean en la necesidad de enfrentarse verbalmente a la gobernadora, para que esta se digne a escucharlos. El conflicto magisterial requiere de sensibilidad y oficio político por parte de las autoridades, en todos los niveles, a fin de desactivar a uno de los conflictos sociales más relevantes que tienen lugar en nuestro país, manifestó Alfonso Durazo Montaño.
“Aunque si bien fue un momento de tensión, afortunadamente no se repitió el enfrentamiento entre policías y trabajadores como ocurrió en el Hospital Chávez. Sin embargo, no dejan de ser preocupantes este tipo de encuentros ríspidos, ya que son consecuencia de la falta de diálogo y el desconocimiento de la autoridad al derecho de disentir; el diálogo es un elemento esencial de la democracia”, opinó el dirigente estatal de Morena.
“A pesar de que el gobierno afirma que la evaluación educativa ha sido exitosa y que no dará marcha atrás en el cese de más de 3 mil maestros a nivel nacional y de cerca de 80 a nivel estatal que se negaron a presentarla, las manifestaciones demuestran que el problema sigue vigente, que hay inconformidades, que esperan ser escuchadas y que el conflicto debe ser resuelto vía el respeto a los derechos laborales y sociales de los maestros opositores a la mal llamada reforma educativa.
“Toda mejora de la educación en México debe incluir a los maestros y tomar en cuenta su experiencia. Una reforma educativa digna de este nombre, requiere abordar los contenidos de la educación, la mejora física de las escuelas y de las condiciones laborales y materiales en las que los maestros desarrollan sus actividades”, finalizó el presidente de MORENA.